Camile no es guapa y lo sabe. Debido a su aspecto no lo ha tenido fácil para conseguir pretendientes, un hecho que siempre ha sobrellevado con estoicismo. Sin embargo, todos sus sueños de amor se cumplen cuando Garret, comandante de la Royal Navy, se enamora profundamente de ella y comienzan a hacer planes para iniciar una vida en común. Meses más tarde, y debido a una contrariedad, Garret rompe el compromiso y Camile, a duras
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Camile no es guapa y lo sabe. Debido a su aspecto no lo ha tenido fácil para conseguir pretendientes, un hecho que siempre ha sobrellevado con estoicismo. Sin embargo, todos sus sueños de amor se cumplen cuando Garret, comandante de la Royal Navy, se enamora profundamente de ella y comienzan a hacer planes para iniciar una vida en común. Meses más tarde, y debido a una contrariedad, Garret rompe el compromiso y Camile, a duras penas, intenta retomar su vida.
Pero las circunstancias y el destino tienen otros planes para ella y no están dispuestos a permitírselo.
Los lectores han dicho...
«Me ha resultado un relato muy entretenido, divertido y con unos personajes muy interesantes. Al tratarse de una historia corta, se lee muy rápidamente porque además de tener pocas páginas, es muy amena.»
Isabel, Blog Vuelve la página
«Por supuesto, los rumores eran todos ciertos y Camile no me ha defraudado en absoluto. Es una lectura fresca, con unos personajes encantadores y muy humanos. Solo hay una cosa mala en esta historia y es lo corta que se hace. Garantizo que se os pasará el tiempo volando. La recomiendo 100%.»
«Elizabeth Urian nunca defrauda. Esta novela corta se lee en un suspiro y te deja con ganas de más.»
«De principio a fin adorable,maravillosa y con todo los ingredientes para hacerme disfrutar de la buena lectura. Eso sí, con ganas de saber más.....¡¡¡¡Qué final más bueno!!!»
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Tenía ganas de empezar esta colección y ahora tengo más ganas de continuarla. La historia es sencilla, amena, entrañable. Camile es una joven que sabe muy bien lo que quiere en la vida, ni más ni menos que un amor verdadero y profundo, y cree haberlo perdido para siempre. Y es que Garret ha perdido las ganas de soñar y cree que Camile estará mejor sin él. Tengo que decir que si bien le he querido dar un mamporrazo a Garret por ser tan ciego, también admiro muchísimo a los personajes que daría su misma alma por la felicidad de la persona a quien aman. Y este es el caso de Garret y Camile. Una lectura que incita a seguir conociendo al resto de feas... Allá voy!